Salir en las primeras horas del día es sinónimo de poco tiempo para para arreglarse. Ya sea por preparar el desayuno, unos minutos más en la cama o no encontrar las llaves del auto. La realidad es que maquillarse puede ser vista como una actividad a realizar dentro del auto. Sin embargo, así como ir en el celular, puede representar ser un gran peligro para ti y los demás conductores. Hoy en MAPFRE México te platicamos la razón.
Pierdes visibilidad
Lo más cómodo es utilizar el espejo retrovisor para aplicar algo de delineador o rímel. El problema es que, al moverlo de lugar restas tiempo para responder ante alguna eventualidad. Tu visibilidad cambia y no podrás anticiparte a lo que ocurre detrás de ti. De la misma manera, el usar el espejo que está en la visera bloquea tu vista y te distrae de lo que ocurre al frente.
No puedes maniobrar con facilidad
Tener un objeto en las manos entorpecerá tu tiempo de reacción, así como el agarre del volante. En caso de emergencia o al maniobrar, el maquillaje en tus manos hará mas difícil esta actividad; haciendo que detengas el tráfico o causes algún accidente. Además, el maquillaje puede caerse y estorbar en los pedales, causando complicaciones más graves.
Puedes lastimarte
Tal vez eres una experta al volante y crees que maniobrar no será un problema, pero existe el riesgo de lastimarte a ti misma. Especialmente si estás aplicando rímel o máscara de pestañas. Existe la posibilidad de un movimiento repentino que te obligue a detenerte rápidamente o sufrir un choque.
Recuerda que tu seguridad al volante está en tus manos. Evita aquellas conductas que puedan afectar tu manejo y procura darte unos minutos más antes de salir para arreglarte. Y, si te toca mucho tráfico por las mañanas, aquí te compartimos algunas cosas que puedes hacer mientras estás en el tráfico.
En MAPFRE nos interesa mucho tu seguridad y, además de estos consejos, también contamos con seguros para tu auto que te protegerán contra cualquier accidente. Conócelos en nuestra página o comunicándote al 800 062 7373.
